sábado, 4 de noviembre de 2017

Nuestra cita cotidiana

Las caricias
Necesitamos una dosis de afecto suficiente para soportar los tortazos que nos da la vida. Salvaremos sana nuestra  mismidad https://es.wikipedia.org/wiki/Mismidad si conservamos la dosis necesaria de cariño entre nosotr@s.
Ayer y esta mañana hubo mucho cariño en el blog y en el grupo de Twitter.
Que nadie lo tope a menosprecio, pero queremos comentar el asunto del comentario de  Miguel, desde Catalunya. Nos permitimos traducirlo: “vuestro esfuerzo vale la pena. Me gusta todo lo que ponéis”. Eso acaricia.
Indicábamos  lo de “sin menosprecio”, porque apreciamos mucho la fidelidad de l@s visitantes de USA, la contante subida de l@s de España, de Canadá, de Francia de… Aquí no hay menosprecio, tendríamos que nombrar a much@s, tú sabes que estás y la lista podría hacer indigesta la lectura.
Sí, estás tú,  y te sentimos, aunque los marcadores te excluyan, como ocurre con los venezolanos,  o suframos los desvaríos de la red, que nos dificulta el acceso.
No dejemos que el impacto tecnológico borre nuestras caricias.


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